TAGUARUMO, Formación

Formación Taguarumo

VALIDO

CRETACICO (Barremiense)

Estado Sucre

Referencia original: E. Von Der Osten, 1954, P. 139.

Consideraciones históricas: Von Der Osten (1954) definió a Taguarumo, como el miembro superior de la Formación Barranquín, sensu Liddle (1928, 1946). Guillaume et al., (1972), lo ascienden al rango formacional, lo cual es criticado por Rosales (1976) por considerar que la separación de Taguarumo de la Formación Barranquín, es de carácter bioestratigráfico y no litoestratigráfico. Macsotay et al., (1986), mantienen el caracter formacional, sustentado por criterios litoestratigráficos distintivos. El término Taguarumo como miembro, aparece en ambas ediciones previas del Léxico Estratigráfico de Venezuela (1956, 1970), pero carente de su criterio de validez.

Localidad tipo: Se halla en la isla Picuda Grande, desde las calizas gemelas de color verde olivo, en la parte central de la isla, hasta su contacto con las calizas de la Formación Borracha suprayacente (Von Der Osten, 1954), en el morro de Picuda. Recibe su nombre de Punta Taguarumo, en la vecina isla de Caracas del Este. Guillaume et al., (1972) reducen esta sección, argumentando la presencia de la Formación García en el morro de Picuda; sin embargo, la litología expuesta en el morro corresponde a la Formación Taguarumo y no a García.

Descripción litológica: La Formación Taguarumo consiste en una secuencia de lutitas y areniscas, con dominio de las primeras, donde con frecuencia se hallan calizas verdes con Trigonia (Von Der Osten, 1954). Las lutitas y areniscas se hallan en paquetes macizos plurimétricos, a diferencia del Miembro Picuda de la Formación Barranquín, infrayacente, y sus lutitas son negras en lugar de los colores brillantes. Su contacto con el Miembro Picuda, en ausencia de las calizas gemelas, es difícil de precisar (Von Der Osten, op. cit.). Macsotay et al., (1986), distingue la Formación Taguarumo en base a que sus intervalos pelíticos están dominados por ritmitas limo-arenosas (lutitas arenosas de Von Der Osten, op. cit.) y limolitas. Las ortocuarcitas son de colores claros, las limolitas son negras, meteorizando a rojo, amarillo y verdoso; las ritmitas son de color gris a castaño. La estructura sedimentaria dominante en las ortocuarcitas, es la estratificación cruzada. La bioturbación de la icnofacies de Chondrites es frecuente en las perlitas; en la base de las calizas se observan galerías de Macanopsis y las Thalassinoides. Las ortocuarcitas forman capas competentes, no lenticulares.

En la serranía de Guariquén, la parte inferior de la Formación Taguarumo fue separada con el nombre de Miembro El Cazón (Guillaume et al., 1972). Este miembro consiste en lutitas calcáreas macizas, micáceas, y lodolitas con concreciones intercaladas con capas delgadas de calizas silíceas duras, de color gris oscuro.

Espesor: Según Von Der Osten (1954), posee 660 m medidos en la isla Picuda Grande, lo cual se reduciría a 250 m de aceptarse el tramo adjudicado a la Formación García por Guillaume et al., (1972). Achurra en González de Juana et al., (1980), midieron 1.125 m en la sección incompleta de la península de Manare, donde puede haber repetición de la sección por fallas.

Extensión geográfica: Descrito originalmente de la región de Santa Fe, (Von Der Osten, 1954), fue extendido por todo el norte de la serranía del interior oriental por Guillaume et al., (1972), desde el islote Caribe, al oeste de la isla Borracha, hasta la serranía de Guariquén. Macsotay y Vivas (1985), la citan al norte del corrimiento de El Naranjo, en el dominio archipiélago Guaiquerí-Manare; al sur de éste, la Formación Barranquín no es divisible, tal como afirmara Rosales (1960). Las secuencias dominadas por calizas macizas con rudistas, incluidas en esta formación por Guillaume et al., (1972) de los afloramientos septentrionales del río Carinicuao, fueron separados como Formación Chuparipal por Macsotay y Alvarez (1987).

Contactos: Su contacto inferior es transicional por interdigitación lateral y vertical; el contacto superior es abrupto con las lutitas arcillosas de la Formación García suprayacente (Guillaume et al., 1972). Los desarrollos dominados por calizas macizas de rudistas, aflorantes en el extremo nororiental de la serranía, corresponden a la Formación Chuparipal. Esta última es su equivalente distal de plataforma externa, y su superposición actual es resultado de los corrimientos terciarios intramontanos (Macsotay y Alvarez, 1987). La Formación Taguarumo sensu Macsotay et al., (1986), no se reconoce al sur de los corrimientos intramontanos mayores: El Naranjo, El Culón; al sur de los mismos, aflora ampliamente la Formación Barranquín en su facies tipo Picuda (Rosales, 1960, Vivas, 1987).

Fósiles: Von Der Osten (1954) cita del área tipo, abundantes moluscos bivalvos, entre los que merecen citarse: Mediterraneotrigonia hondaana (Lea) Pterotrigonia tocaimaana (Lea), Panope neocomiensis (d' Orbigny), Arctica protensa (Woods) y el rudista Caprina plumensis (Harris y Hodson); localmente se observaron corales hermatípicos: Astrocoenia whitneyi Wells, Meandrophyllia cariacoensis Wells y Elasmophyllia tolmachoffana (Wells). Los foraminíferos bentónicos Choffatella decipiens Schlumberger y Pseudocyclammina hedbergi Maync, se conocen de toda la formación (Guillaume et al., 1972). Royo y Gómez (1953) cita Aetostreon latissimus (Lamarck) (Exogyra couloni auctt.) Neithea syriaca (Conrad) entre otros, demuestran la afinidad Tethysiana de la fauna. Los niveles con abundantes plantas detríticas: Weichselia aff. peruviana ( ), Otozamites sp., y Brachyphyllum sp., se hallan restringidas a la Formación Taguarumo en el dominio septentrional (Macsotay et al., 1986).

Edad: La flora sugirió edad Neocomiense a Schlagintweit (1919) y a Royo y Gómez (1960); los corales presentan afinidades Urgonianas (Barremiense-Aptiense inferior) para Wells (1944). Los moluscos cosmopolitas estudiados por Royo y Gómez (1953), le sugirieron edad Neocomiense-Barremiense. Von Der Osten (1954), también se inclinó por una edad semejante, y sólo la correlación forzada con fauna (1957) de la Formación Glen Rose (Texas, U.S.A.), le llevó a una edad Aptiense. Guillaume et al., (1972), le adjudicaron edad Aptiense inferior en base a foraminíferos de biozona muy extensa. Macsotay et al., (1986), en base a moluscos bentónicos (Sphaera corrugata, Diptyxis riveroae y Adiozoptyxis coquandiana) le asignan edad Barremiense.

Correlación: Correlaciona con la parte superior de la Formación Barranquín, del dominio Bergantín, meridional, de la serranía del interior oriental (Vivas, 1987) y con el Miembro Taguarumo del bloque de Caripe (Yoris, 1985). Su semejanza litológica es mayor con las formaciones Toco y Coche de Trinidad, que con las correlativas de la Formación Barranquín (Guillaume et al., 1972). También es correlativa de la Formación Chunaripal del Estado Sucre, y de la Formación Yuruma, de la Guajira meridional (Macsotay y Alvarez, 1987).

Paleoambientes: En base de los hallazgos de plantas detríticas Schlagintweit (1919), Royo y Gómez (1960), y algunos moldes de bivalvos ?Cyrena sp., se le adjudicó ambiente de agua dulce a salobre (González de Juana et al., 1980). Las calizas de la unidad se debieron a continuas fluctuaciones producidas por el avance o retirada del mar, (Rosales, 1960). Para Guillaume et al., (1972), la ausencia de ammonites, unida a la presencia de foraminíferos bentónicos, sugiere ambiente sublitoral, de plataforma interna. Macsotay et al., (1986) en base a icnofauna y moluscos fósiles, proponen paleoprofundidad de 150 ± 30 m con una posición distal sobre la plataforma submarina.

Véase BARRANQUIN, Formación.

© O. Macsotay, M. Wehrmann y F. Yoris, 1997

Referencias

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